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TÉ MORUNO CON HIERBABUENA

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Ingredientes:
Para cuatro personas

– 1 litro de agua hirviendo
– 2 cucharaditas de té verde.
– 8 cucharaditas de azúcar (mejor si es azúcar morena).
– 1 manojo grande de hierbabuena fresca.
– 2 cucharadas de agua de azahar.

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El té moruno (أتاي (atāy)) es una opción excelente para tomar después de las comidas porque el té verde con hierbabuena (شاي بالنعناع  (shāy bi l-na`anā`)) es una de las bebidas más saludables que podemos consumir debido a su alto nivel de antioxidantes y sus propiedades digestivas. Además de ayudarnos a prevenir el envejecimiento prematuro, también posee propiedades digestivas, por lo que se trata de una bebida muy recomendada para después de comer.
A las propiedades del té verde se suma que tanto la menta piperita como la hierbabuena son dos tipos de plantas que destacan por sus propiedades digestivas. Esto se debe a la presencia de mentol, carvacrol y eugenol, una serie de aceites esenciales que poseen de forma natural y que favorecen directamente la función hepática justo en el momento en el que las consumimos. De esta forma, se trata de una familia de hierbas que van a acelerar el proceso digestivo, van a evitar la acumulación de gases y van a proteger los órganos que participan de forma directa en la digestión.
El té se debe servir en pequeños vasos de vidrio vertiéndose desde lo alto para crear espuma, signo de un té de buena calidad.

Receta:

En un cazo, ponemos a hervir un litro de agua.

En una tetera ponemos el té verde y lo lavamos con un poco de agua hirviendo (½ taza de té más o menos, unos 75 ml.). Reservamos la infusión resultante de este primer lavado.

Volvemos a lavar el té, esta vez con más cantidad agua hirviendo (1 taza de té, unos 150 ml.) realizamos movimientos circulares con la tetera y desechamos esta infusión del segundo lavado.

Cubrimos las hojas de té con un buen manojo de hierbabuena fresca bien limpia.

Echamos por encima el azúcar (mejor si es azúcar morena y la cantidad podemos adecuarla a nuestro gusto) , agregamos el primer agua del té y el resto del litro de agua hirviendo.

Añadimos el agua de azahar y dejamos reposar unos minutos.

Removemos y servimos en pequeños vasos de vidrio con un poco de hirbabuena fresca en su interior y vertiéndo el té desde lo alto para crear espuma. Podemos rectificar de azúcar si se desea.

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